materiaverbalis
7 de octubre de 2010
 
VARGAS LLOSA


Todos contentos. Ganó el Premio Nobel de Literatura 2010 un grande. Mario Vargas Llosa. Alguien que arriesgó todo por su pasión. En noviembre sale su última novela: El sueño del celta. Aquí recuerdo su anterior novela: Travesuras de una niña mala. Hace casi exactamente 4 años (fuck! Cómo vuela el tiempo). Su homenaje a otra novela que amo La educación sentimental. Flaubert. Hoy quiero lanzar mi propio homenaje en mi inédita novela El síndrome Fred Astaire. Capítulo 25.



25

Lo primero que hago al llegar a la oficina es escribirle un mail a D.

Querida D:

Tú tendrás muchas más posibilidades de salvarte. Yo estoy condenado. Si no apareces hoy, el lado oscuro de la luna empezará a eclipsarse otra vez sobre mí.

¡Aparece ya!

Todos los días he tenido el temor de encontrar una carta de despido sobre mi pupitre anunciando mi expulsión inmediata y sin juicios de por medio de la universidad, por acoso sexual y seguimiento continuo a la alumna D. Por cuyo caso (seguiría la carta), usted ha sido removido de su puesto y, en consecuencia, debe dejar inmeditamente su oficina. Pero nada de esto ha sucedido. En cambio, concluyo por segunda vez: la telepatía existe, no se trata de esta ficción, es un hecho. Dos personas pueden estar interconectadas. Al final la vida no es más que química e impulsos electromagnéticos. No hay nada misterioso en el exterior, ni libre albedrío ni destino (qué tonterías inventa el hombre para limitar su voluntad o llenarse de culpa), todo se explica mediante compuestos químicos y diminutos electroshocks alojados en las omnipresentes ondas electromagnéticas. Según el artículo aparecido en el último semestre del año en curso de la versión australiana de Animals Review, escrito por Clark Stevenson, Ph. D. in Reproduction, Sex and Death: “Si las zarigüeyas emiten su delicioso olor para anunciar su celo, por qué los humanos deberíamos ser racionales y electivos. No hay lógica. Todo se reduce a tu perfume corporal. No usar desodorante, no bañarse. No cambiarse la ropa interior: el amor tocará tu puerta”.

Las ondas electromagnéticas me trajeron a D otra vez. Cupido con el calzoncillo sucio toca a mi puerta. Así como desapareció un día, hoy apareció sentada en el mismo lugar de siempre. Con la misma mirada de indiferencia frente al mundo y las personas, el mismo gesto de profundo hastío. Estoy cautivado por esa indeferencia ante el mundo, quizá reflejo de un odio visceral como el mío. Una isla singular en medio del anónimato de otros jóvenes igualmente somnolientos. Toda la clase estuvo dirigida a ella: la señora Arnoux, la esquiva y ubicua amada del joven Fréderic Moreau. La gran novela de la desilusión: La educación sentimental de Gustave Flaubert. La gran ficción de la eterna espera en el amor, la realización del amor. Las idas y venidas, la aceptación y el rechazo. Todo desde los ojos siempre ansiosos de Moreau, incomprensible juguete de las pasiones de su inconstante amada. El mal burgués que por un estúpido ideal de amor aplaza su futuro y fracasa en la compulsión de la vida moderna. Por ejemplo, llevándolo a los términos de esta historia, M es un típico Moreau, aunque algo más inconstante. Su amor es inconstante, está buscando cualquier mujer en la que se encarne su necesidad de afecto, pero él está muerto de antemano. Eso es trágico: ¡esperar que el amor se encarne! ¡Esperar que el ideal se encarne! Así consiga enamorar a esa mujer, le resultará imposible mantener la llama ajena y la suya propia. Quizá él lo sabe, por eso encarna en mujeres como Do (alguien a todas luces superficial, alguien que nunca sabrá apreciar los sentimientos absolutos que M cree interpretar de mal modo) su ideal del amor, las ficciones que M cree puedan llegar a convertirse en realidad. Porque hasta en el rechazo hay más calor que en el vacío. Por eso, Moreau y M sufren de la misma desilusión por alcanzar el calor de la absoluta aceptación o el más arbitrario de los rechazos.

La búsqueda de aplacar el vacío interior...

(El síndrome Fred Astaire)
 
Comentarios: Publicar un comentario

Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]





<< Página Principal
Y MIENTRAS TANTO... EL PULSO SIN DESCANSO, EL PULSO SIN DESCANSO...

Mi foto
Nombre: Franco
Ubicación: Lima, Lima, Peru

FRANCO. Del germ. Frank: libre, exento. Sencillo, sincero, ingenuo y leal en su trato. Liberal, dadivoso, bizarro y elegante. Desembarazado. Libre, exento y privilegiado. Patente, claro, sin lugar a dudas. CAVAGNARO: es un apellido italiano originario de Parma pero extendido en Liguria, donde existe un río con ese nombre. Existen datos desde el siglo XIV. Pasaron a América desde el siglo XVI y en mayor cantidad desde el siglo XIX a Estados Unidos, Argentina y Perú. Hay estudios sobre la rama peruana que inició un Angelo Cavagnaro, de San Andrea de Verzi, que llegó en 1852 con toda su familia.

Archivos
junio 2006 / julio 2006 / agosto 2006 / setiembre 2006 / octubre 2006 / noviembre 2006 / diciembre 2006 / enero 2007 / marzo 2007 / abril 2007 / mayo 2007 / junio 2007 / julio 2007 / agosto 2007 / setiembre 2007 / octubre 2007 / noviembre 2007 / diciembre 2007 / enero 2008 / febrero 2008 / marzo 2008 / abril 2008 / mayo 2008 / junio 2008 / julio 2008 / agosto 2008 / setiembre 2008 / octubre 2008 / noviembre 2008 / diciembre 2008 / enero 2009 / febrero 2009 / marzo 2009 / abril 2009 / mayo 2009 / junio 2009 / agosto 2009 / setiembre 2009 / octubre 2009 / noviembre 2009 / diciembre 2009 / enero 2010 / febrero 2010 / marzo 2010 / abril 2010 / mayo 2010 / junio 2010 / julio 2010 / agosto 2010 / setiembre 2010 / octubre 2010 / noviembre 2010 / mayo 2011 /


Powered by Blogger

Suscribirse a
Entradas [Atom]