Nunca había leído algo tan nuevo y tan viejo a la vez. Las primeras 100 páginas de La posibilidad de una isla (2005) de Michel Houellebecq son trepidantes, atrevidas, políticamente incorrecta y beben su rollo de muchas cosas desde las revistas para adolescentes, la clonación, las sectas religiosas resurrectas, el stand comedy, los autos y las casas de lujo, el riko chuckulum y otras perlas más.
¿De qué va La posibilidad de una isla? Según Letras Libres va así: un comediante, Daniel, fatiga sus días a principios del siglo XXI. Es famoso y millonario. Está solo y agotado. De pronto conoce a una mujer y la mujer lo martiriza. De pronto asiste al nacimiento de una secta y la secta crece hasta volverse la religión dominante. De pronto envejece y, viejo, es clonado. Dos mil años más tarde el eco de Daniel persiste en sus clones, Daniel 24 y Daniel 25, de una naturaleza distinta a la de los humanos. Daniel 25, aislado, cede a la tentación de conocer el mundo.
Aunque esta novela parece ser absolutamente nueva es bastante viejo el tema sobre el cual más allá de lo denotativo y novedoso gira: la vejez, el desamor. Pero precisamente por eso es tan divertida y reflexiva a la vez (hacia el final declina bastante, pero vamos no todo es perfecto). Pensé en dos cosas al inicio nomás (de arranque) cuando el protagonista narrador explicaba su meteórico ascenso en el star sistem europeo como comediante: recordé esa otra gran novela alemana con otro comediante patético, bastante más entrañable que el infinitamente clonado Daniel, esa novelita de Hienrich Boll: Opiniones de un payaso, que también exorciza la magullada alma de otro payaso, aunque sus penas son sobre todo políticas. En fin, y pensé en ese gran monstruo literario que es Balzac. Pero pensé en sus personajes, a quienes Daniel conoce bien y sobre quienes reflexiona. Claro otro buscador de dinero y fama es él mismo. Así que él también es un clon literario de los jóvenes arribistas de Las ilusiones perdidas, por ejemplo, o del verdadero ser de todos los demás arribistas, el más antiguo: Julien Sorel, de esa otra novela stendhaliana: Rojo y negro. De alguna manera (qué casualidad) Houellebecq es también un corolario de Balzac y su clon Balzac101 (quisiera ser el 120). La sociedad de consumo en su máxima y más refinada decadencia. ¿Y quién tiene la verdad? Un payaso. Así como ocurría en la novela de Boll, un payaso denunciando a la sociedad alemana de post guerra y sus culpas nazis. En fin, como dije no hay nada más contundente que esas primeras 100 páginas con el cinismo que caracteriza a Houellebecq y ese atractivo que tienen los chicos malos. Pero lo que diferencia al francés de otros por el estilo es su refinada reflexión. Esa poderosa manera de relacionarlo todo (lo nuevo) a esa cosa amorfa y eternamente vieja que es la imposibilidad de una isla en un mundo hostil, biológico y darwiniano. Palmas.
Queda pendiente mi lectura de Las partículas elementales y la visión de la pela, que hace un par de meses cheké en cable (los últimos 15 minutos) y prometía mucho. Ya no la repitieron o si lo hacían era a las 2 de la mañana (no se maleen). Actuaban Franka Potente y su par de Corre Lola Corre. La pela claro está basada en la novela homónima de Michel Houellebecq. Aquí un extracto para que vean por donde va el tío.
Oh shit!! Como dirían los Buzzcocks. Jordi Dauder está rodando en España, a las órdenes del escritor Michel Houellebecq, "La posibilidad de una isla". What the fuck!!!
Más info aquí: http://www.hoycinema.com/actualidad/noticias/CINE-RODAJE-prevision-Jordi-Dauder-rueda-Espana-primer-largometraje-Michel-Houellebecq.htm
Aquí otra versión: http://images.google.com.pe/imgres?imgurl=http://img.blogdecine.com/la%2520posibilidad%2520de%2520una%2520isla.jpg&imgrefurl=http://www.blogdecine.com/2006/08/18-michel-houellebecq-quiere-dirigir-la-adaptacion-de-su-novela-ala-posibilidad-de-una-islaa&start=2&h=500&w=329&sz=31&tbnid=HZjkOJxBSucuBM:&tbnh=130&tbnw=86&hl=es&prev=/images%3Fq%3Dla%2Bposibilidad%2Bde%2Buna%2Bisla%26gbv%3D1%26hl%3Des%26sa%3DG
¶ 10:11 a. m.
FRANCO. Del germ. Frank: libre, exento. Sencillo, sincero, ingenuo y leal en su trato. Liberal, dadivoso, bizarro y elegante. Desembarazado. Libre, exento y privilegiado. Patente, claro, sin lugar a dudas.
CAVAGNARO: es un apellido italiano originario de Parma pero extendido en Liguria, donde existe un río con ese nombre. Existen datos desde el siglo XIV. Pasaron a América desde el siglo XVI y en mayor cantidad desde el siglo XIX a Estados Unidos, Argentina y Perú. Hay estudios sobre la rama peruana que inició un Angelo Cavagnaro, de San Andrea de Verzi, que llegó en 1852 con toda su familia.